Montaje Tarima Flotante: Pasos Básicos y Consejos Prácticos

Vas a realizar una instalación de tarima flotante o suelo laminado por primera vez. Aquí encontrarás los consejos indispensables para que quede perfecta

Madera

A diferencia de los suelos de parquet tradicional, colocar tarima flotante es un procedimiento rápido y sencillo, gracias a los nuevos sistemas de clic que utilizan en la actualidad la mayoría de las marcas del mercado.

Estos sistemas de clic hacen que ya no sea necesario el uso de clavos ni de colas, ya que las planchas se colocan encajando unas con otras sin la necesidad de estar fijadas al subsuelo, de ahí que se denomine flotante.

¿Te atreves a colocar tú mismo la tarima flotante de tu casa? Aquí tienes algunos consejos:

Aclimatación de la tarima flotante

Deja la tarima flotante durante al menos 48 horas en la habitación donde vayas a colocarla, para que el material se vaya aclimatando a las condiciones ambientales de la estancia.

La importancia de este punto radica en que la madera es un material natural que se dilata y/o contrae en función de la humedad ambiental. Si la aclimatamos a las condiciones de la ubicación donde se instalará las probabilidad de defectos de instalación debido a la dilatación se reducen significativamente.

Dos personas

Si no tienes experiencia en colocar tarima flotante, te recomendamos que realices la instalación acompañado de al menos otra persona. ¡Todo será mucho más fácil!

Instrucciones del fabricante

Aunque todas las tarimas con sistema de clic se colocan de forma similar, te recomendamos que antes de hacer nada leas con detenimiento las instrucciones del fabricante. Cada marca tiene sus peculiaridades. Algunas posibles diferencias son:

  • Tipo de clic. Existen diferentes tipos de anclaje, y por tanto, la forma de encajar la piezas no siempre es igual.
  • Distancias para la colocación de juntas. En función de las características de la tarima varía la distancia máxima entre juntas de dilatación.

Comprueba el estado del suelo

Aunque la tarima flotante se puede colocar directamente sobre el suelo antiguo, si este está hinchado o en mal estado habrá que quitarlo y/o repararlo.

Comprueba también que tu suelo esté bien nivelado. En caso contrario, necesitarás aplicar primero pasta niveladora.

Asegúrate también de que el nuevo suelo va a caber por debajo de puertas y zócalos. Probablemente tengas que recortar la puerta, para lo que puedes usar una radial pequeña (o bien llevar la puerta a algún sitio para que lo haga un profesional).

Asimismo, el suelo donde vayas a colocar la tarima flotante debe estar seco y limpio.

Coloca el aislante

Antes de ponerte a colocar la tarima debes colocar primero una capa de aislante (foam) compuesta de espuma de polietileno de 2 o 3mm de espesor. Asegúrate de no dejar huecos.

Este punto es mucho más relevante de lo que parece. De hecho, para las personas que instalan la primera vez suele ser algo de poca o nula importancia.

La manta cumple con muchas funciones, siendo la principal el bloquear el paso de la humedad desde el subsuelo hacia la tarima. Cuando esto sucede, la tarima suele levantarse, y el trabajo de reparación es complejo y no siempre puede realizarse, lo que implicaría una nueva instalación.

Empieza a colocar la tarima flotante

Puedes empezar por cualquier parte de la habitación, pero debes acabar siempre en la puerta.

Dependiendo de la forma de la habitación, la tarima se colocará en un sentido u otro. Generalmente se aconseja empezar a colocarla de forma perpendicular a la pared en donde está ventana (en el sentido de la luz) para que, con la luz solar, la estancia parezca más amplia. Esto también te permitirá disimular posibles errores.

¡Y asegúrate de que las planchas estén rectas en relación con la pared! Si la pared no está recta, tendrás que recortar la tarima.

¡No lo dejes a medias!

Te recomendamos que procures hacer todo el trabajo el mismo día y, sobre todo, no dejes la tarima a medio colocar durante varios días. Al hicharse las planchas de tarima ya colocadas por el efecto del calor, tendrás muchos problemas para seguir colocando las nuevas.

Disfruta de tu nuevo suelo

Otra de las ventajas de colocar tarima flotante es que el suelo está listo para usar de forma inmediata a su instalación. Así que, una vez que hayas terminado la instalación, ya puedes colocar los muebles y hacer vida normal.