Pavimento Impreso: Características, Usos e Instalación

El pavimento impreso es un pavimento hecho con hormigón al que se le da forma superficial mientras aún está fresco. Se utilizan diferentes moldes en función del tipo de pavimento que se pretenda imitar: adoquines, baldosas o piedras. Es frecuente también la aplicación de pigmentos con un doble objetivo, parecerse más a lo que estemos imitando y evitar esa bruta apariencia del hormigón.

Lo normal es adquirir la capa superficial ya mezclada con los colorantes, resinas y otros agentes endurecedores en forma de polvo.

El precio del pavimento impreso de hormigón puede fluctuar bastante. Se debe entre otras cuestiones a la calidad de los materiales, a los pigmentos utilizados y al proceso de moldeado o impresión. Por tanto, podemos encontrar precios desde los 15€ a los 40€ por metro cuadrado.

No es ni mucho menos algo novedoso o vanguardista. Se trata de una solución resistente y práctica para exteriores que está viviendo un nuevo auge gracias a la utilización de muy variados pigmentos. El uso del cemento impreso en interiores es muy limitado, de ahí que se le considere directamente como un pavimento de exteriores.

Características del pavimento impreso

• Grandes posibilidades en lo que a diseños y personalización se refiere.
• Son resistentes y duraderos.
• Las reparaciones son sencillas y económicas. Aunque es muy complicado conseguir exactamente la misma tonalidad.
• No necesita mantenimiento. Aunque se recomienda la aplicación de barnices cada pocos años.
• Apta para zonas de mucho tránsito. De hecho es para lo que está pensado.
• Es antideslizante.
• Impermeable.
• Resistente a grandes cambios de temperatura.
• Tiempos cortos de ejecución.

Cómo se Hace el Pavimento de Hormigón Impreso

Existen diferentes pasos para la correcta instalación de un pavimento impreso. Estos son los principales:

• Nivelación y preparación de la superficie.
• Encofrado.
• Colocación de la tela metálica.
• Vertido del hormigón y nivelación.
• Aplicación de colorantes, resinas o pigmentos.
• Creación de las formas con los moldes.
• Se deja secar la superficie. Seguir las instrucciones del fabricante.
• Lavado con agua a presión de la superficie.
• Aplicación del barniz sellador.