Pavimentos de Piedra Natural: Tipos, Propiedades, Instalación y Mantenimiento

A pesar de ser el material de construcción más antiguo, el interés por los suelos de piedra natural no decae. Se debe a sus ventajas: naturalidad, resistencia, variedad

Piedra

La piedra es sin lugar a dudas el material de construcción más antiguo que se conoce. Con los años se ha mejorado la forma de extraerla, tratarla e instalarla, sin embargo la esencia sigue siendo la misma.

El interés por este material, más concretamente por los pavimentos o suelos de piedra, no ha decaído gracias a las ventajas que ofrece: naturalidad, variedad y mucha más resistencia de la que ofrecen muchos productos industriales de vanguardia.

Ventajas de los Pavimentos de Piedra

  • Duraderos.
  • Resistentes.
  • Belleza Natural.
  • Existen múltiples opciones y formatos, con los que adaptarnos a cualquier estilo decorativo. Los podemos encontrar en ambientes rústicos, modernos, elegantes…
  • Se integran fácil y naturalmente con el ambiente o entorno a nivel paisajístico.
  • Fáciles de limpiar.
  • No necesitan de grandes tareas de mantenimiento.
  • Aptos para uso en exteriores. Resisten sin inmutarse el frio, la lluvia, lo cambios de temperatura…
  • Bajo impacto ambiental. Al tratarse de un producto natural que requiere de un proceso de transformación muy limitado se consume mucha menos energía que la utilizada para producir una baldosa cerámica, por ejemplo. Según esto podemos afirmar que es sostenible en este sentido. Habría también que considerar otras variables como la energía consumida durante el transporte y/o el impacto generado en la cantera, para que una afirmación como este sea completamente cierta. Además es reutilizable, se puede colocar en una nueva construcción prácticamente sin modificación alguna.
  • Es ignífuga. Es decir, no arde.

Inconvenientes de los Suelos de Piedra Natural

  • Fríos. Los pavimentos de piedra natural son fríos en contacto directo con la piel, lo que generará cierta incomodidad entre algunas personas a las que les gusta caminar descalzas en casa, especialmente en invierno.
  • Se pueden manchar. No estamos normalmente ante materiales impermeables, sino más bien porosos. Los tipos de piedra que más problemas pueden presentar en este sentido son el mármol y la caliza. No solo se pueden manchar cuando les cae algún producto ácido, en exteriores la oxidación puede hacer auténticos estragos.
  • Pisada dura.
  • Precio Elevado. El precio de la piedra natural no es bajo, y puede ser muy alto en función de la exclusividad de la piedra utilizada.
  • Peso Elevado. La piedra natural es pesada, lo que puede implicar sobrecargar una estructura y afectar a su estabilidad, especialmente en edificios de varios pisos.
  • Las reparaciones son muy complejas o imposibles. En caso de rotura de piezas, habrá que sustituir.

Tipos de Pisos de Piedra

Las piedras para suelos se presentan básicamente en dos formatos. Como lajas irregulares o en forma de losas de tamaño y forma regular, lo que simplifica enormemente la instalación.

Existen muchos tipos de piedra natural para pavimentos, aunque estos son las características de algunos de los más demandados:

Mármol. Es sinónimo de estilo y elegancia. Su precio puede ser elevado en función del tipo de mármol y su exclusividad. Se puede usar tanto en interiores como en exteriores. Su gran problema es que se mancha con cierta facilidad, especialmente con productos ácidos. Sin embargo, si se cuidan y tratan debidamente este no debería ser un gran inconveniente, siendo su durabilidad enorme. Se pueden encontrar piezas de mármol en una gran variedad de colores, desde el negro o el verde, al blanco o rojo.

Granito. Material con excelente resistencia y firmeza. Está disponible en una amplia multitud de diseños, texturas y colores, con los que adaptarse a cualquier estilo y entorno. Se usan tanto en interior como en exterior.

Pizarra. Material resistente y antideslizante. Se encuentra principalmente en tonalidades oscuras y mates. Es habitual su uso en exteriores, aunque con el tiempo se ha hecho un hueco en el interior de muchas viviendas principalmente por la naturalidad que transmite. Como inconveniente podemos decir que es un material poroso, por lo que puede ser necesario sellar la superficie para que las manchas no penetren.

Caliza. Se forman a partir de conchas marinas, de ahí sus tonos claros. Es poroso, y al igual que el mármol se mancha con bastante facilidad frente a productos ácidos. Tiene propiedades antideslizantes y gran resistencia a la erosión.

Arenisca. Destaca por su textura arenosa e interesantes veteados, principalmente en tonos claros y crema. Ofrecen una superficie antideslizante, ideal para zonas húmedas como baños o piscinas.

Basalto. Es una piedra de origen volcánico, muy dura y de color oscuro mate. Se utiliza principalmente para pavimentos rústicos exteriores.

tipos de suelos de piedra

Mantenimiento y Limpieza de la Piedra Natural

Una de las grandes ventajas de la piedra natural es que no requiere de grandes cuidados. Bastará con eliminar la suciedad superficial barriendo o pasando la aspiradora, y periódicamente fregar utilizando agua y jabón neutro.

En el caso de piedras porosas como las calizas hay que evitar que los productos ácidos penetren, ya que de hacerlo la mancharán.

¿Cómo se instalan los Suelos de Piedra?

Existen básicamente dos tipos de instalación: sobre una base de hormigón o sobre una base de arena. Si bien esta última ofrece un resultado más natural y es fácil de ejecutar, presentan importantes inconvenientes.

Instalación sobre Arena

Se trata de una forma rápida y económica de colocar un suelo de piedra. El proceso es el siguiente:

  • Se excava y se compacta el soporte. Dando una ligera pendiente.
  • Se rellena con al menos 10 cm de grava.
  • Se coloca una malla geotextil.
  • Se añaden al menos 5 cm de relleno de arena gruesa.
  • Se vuelve a compactar y se coloca la piedra.
  • Se rellenan las juntas con mortero. El tipo de mortero dependerá del tipo de piedra.

Si bien este tipo de colocación es fácil y rápida tiene importantes inconvenientes. No es muy resistente, por lo que no es una solución para zonas de alto tránsito y mucho menos para tráfico rodado (vehículos). Además el material de las juntas tiende a desaparecer, por lo que habrá que ir rellenando.

Instalación de Piso de Piedra sobre Solera de Hormigón

Este sistema presenta algunas importantes ventajas frente al método anterior: es muy duradero y resistente, y permite tráfico pesado (hasta los límites lógicos impuestos por el material).

El proceso es más complejo y requiere mano de obra profesional.

Algunas Recomendaciones

  • Compra un 10-15% más de piedra de la que has calculado para cubrir la superficie. Siempre hay que realizar cortes, se rompe alguna pieza…
  • Presta atención a la composición del mortero que vayas a usar como adhesivo. Algunas piedras, las más porosas se manchan en presencia de algunos tipos de sales. De ahí que muchas empresas recomienden no utilizar morteros que contienen arena, ya que esta puede contener sales.
  • Respeta las juntas de dilatación sugeridas por fabricantes y distribuidores de los materiales que vayas usar en la instalación. Normalmente de 1,5 milímetros en interior y 3 en exteriores. El objetivo de las juntas es absorber las dilataciones y contracciones que puedan producirse derivadas de los cambios de temperatura y humedad.
  • El rejuntado no debe realizarse como si fueran azulejos, es decir, extendiendo el material. Se debe hacer con una espátula o similar directamente sobre la junta. Se hace así para evitar manchar la piedra.
  • Si tienes que taladrar, hazlo con brocas de widia y empieza con diámetros pequeños, y vete aumentándolo poco a poco.

El Precio de los Pavimentos de Piedra

Cómo es lógico el precio de tener un suelo de piedra se divide en varias partes:

La piedra. El precio del tipo de piedra, su exclusividad, calidad, etc., son los factores que más influirán sobre el coste total. Para hacernos una idea un suelo de granito puede situarse 15-50 €/m2, mientras que la pizarra en baldosas 25-65 €/m2.

La mano de obra. Alrededor 9-15 €/m2. Desde luego pueden existir importantes diferencias, ya que las tarifas las marca cada empresa y no todos los trabajadores son iguales.

Otras materias primas: mortero, arena, cemento… Comparativa y porcentualmente hablando esta partida es pequeña. Se trata de materias primas baratas. Si además la instalación es grande y se compra en grandes cantidades, los precios por kg son aún más reducidos.